Pico-Pal: vuelta al estilo Game Boy Color, con espíritu abierto
El Pico-Pal es un proyecto de handheld retro de código abierto anunciado recientemente, que combina estética clásica —inspirada en el Game Boy Color— con hardware moderno ligero, ideal para desarrolladores, hackers y fans del retro gaming. Aunque todavía no tiene fecha exacta de lanzamiento, ya se ha confirmado que aparecerá próximamente por medio de una campaña de crowdfunding.
Hardware y funciones destacadas
El Pico-Pal está construido alrededor de dos elementos principales: un microcontrolador Raspberry Pi RP2350B y un ESP32. Este combo no permitirá emulación de consolas modernas, pero es más que suficiente para ejecutar sistemas de 8 bits, fantasía como Pico-8, y proyectos caseros gracias a su naturaleza abierta.
La pantalla será una IPS de 2.6 pulgadas con proporción 1:1 (cuadrada), lo que se alinea con la estética Game Boy, y contará con altavoces estéreo y salida de video externa para conectarlo a monitores o televisores. En conectividad se incluyen: puerto USB-C, Bluetooth, Wi-Fi, radio infrarroja, y reloj en tiempo real (Real-Time Clock). Todo esto lo convierte en una plataforma bastante versátil tanto para jugar como para experimentar.
Además, el dispositivo se lanza con software abierto: los creadores liberarán los esquemas eléctricos, el firmware y la lista de materiales (bill of materials). Esto permite que la comunidad pueda modificar, reparar o incluso usarlo para proyectos alternativos, como reproductor de MP3, control remoto Universal o desarrollo de hardware personalizado.
Público objetivo, ventajas y limitaciones
El Pico-Pal no está pensado para competir con portátiles de emulación pesada. Su fuerte está en reproducir consolas clásicas de 8 bits, juegos de fantasía como los que se crean para Pico-8, y en ser una herramienta educativa o de experimentación. Gracias a su pantalla 1:1, varios juegos clasicos se verán sin bordes distorsionados; y con el hardware abierto, los usuarios podrán controlar más aspectos del dispositivo que en modelos cerrados.
Entre las limitaciones esperadas están: rendimiento modesto, imposibilidad de correr juegos 3D exigentes, posible variación en la calidad de audio o materiales según versión; y la dependencia de la comunidad para optimizar software si se quiere exprimir al máximo. También el tamaño y capacidad de batería no están claramente definidos todavía, lo que puede afectar la experiencia de uso prolongado.