Xiaomi no solo presentó su serie de smartphones emblemáticos, sino que también ofreció un accesorio curioso: un estuche que convierte al Xiaomi 17 Pro y 17 Pro Max en consolas portátiles retro. Este case, bautizado como Retro Handheld Console Case, aprovecha la pantalla secundaria trasera del dispositivo y añade controles físicos para juegos clásicos.
De smartphone a Game Boy: diseño y funciones del case
El accesorio integra botones ABXY, un D-pad circular, botones de inicio/selección y un botón dedicado que actúa como lanzador de juegos sin activar la pantalla principal. También incorpora una batería de 200 mAh, con autonomía declarada de hasta 40 días si se usa tres horas al día.
Obviamente, al fijarse el case sobre el teléfono, se pierde la carga inalámbrica del dispositivo. Además, los lentes de la cámara trasera pueden obstruir parcialmente la visión durante el juego, un detalle que podría afectar la experiencia en títulos con acción cerca del borde izquierdo.
El precio en China es de CNY 299 (alrededor de 42 USD), aunque aún no está clara su disponibilidad internacional.
Ventajas, limitaciones y propósito real
Este accesorio llega en un momento en que muchas marcas experimentan con funciones híbridas entre teléfono y consola. Si bien el case no convierte al teléfono en una consola por sí solo, ofrece una capa lúdica interesante que aprovecha su pantalla secundaria trasera (usada como visor o para notificaciones) como interfaz de juego.
Entre sus puntos fuertes está la integración física con botones reales, lo que puede mejorar la experiencia en juegos retro comparado con controles táctiles. También da un uso útil al panel trasero que generalmente queda desaprovechado como simple display de notificaciones.
Sin embargo, sus limitaciones no son menores: la ergonomía no está optimizada como la de una consola dedicada; además, la cámara puede entorpecer la visibilidad en ciertos escenarios y la desactivación de la carga inalámbrica es un sacrificio considerable para algunos usuarios exigentes.
En The Verge, la nota es más cruda en cuanto a experiencia de juego: lo llaman «la mejor y peor manera de jugar», mencionando que los lentes interrumpen visión y la forma genera incomodidad. No obstante, reconocen que la idea tiene encanto para coleccionistas o fans de formatos retro.
¿Tiene sentido este experimento de Xiaomi?
Para quienes ya planeaban adquirir un 17 Pro o 17 Pro Max, el Retro Handheld Console Case puede ser un complemento llamativo, especialmente si disfrutan de juegos clásicos y quieren una experiencia más física. No es un reemplazo de consolas portátiles, sino un accesorio curioso que mezcla nostalgia y utilidad.
Si Xiaomi decide ofrecerlo en mercados fuera de China y el precio y calidad sean adecuados, podría convertirse en un extra deseado. Pero es poco probable que lo veamos como un motivo decisivo de compra para la mayoría de los consumidores.
